cabecera 1080x140

Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

«Otoño», de Jon McNaught

«Melancólica, Otoño dice sin decir, seduce con lo mínimo. Su cadencia, minuciosa, es en buena parte culpable, con viñetas que se suceden como el tic-tac de un reloj».

Un ayudante de cocina prepara el almuerzo en una residencia de ancianos y un repartidor de periódicos hace su ronda de la tarde acompañado por un amigo que le presta un videojuego. Ni más ni menos. A partir de ahí, ‘fill in the gaps’. Y mucho. Porque en esas dos breves frases se resume la trama argumental de Otoño, la aclamada historia gráfica de John McNaught. El resto corre a cuenta del lector. Si la literatura es un estado de ánimo, esta obra lo es aún más, despojada de cualquier inútil subrayado, extensión innecesaria o hasta músculo narrativo. Otoño es una historia en los huesos, y la carne queda de parte del que lee, evoca o imagina. Toda una experiencia que se prolonga mucho más allá de la última página, aunque suene a tópico. Una historia que cala hondo pero para la que hay que elegir un momento de calma, un lugar tranquilo. Merece unas circunstancias especiales para su lectura, esta delicadísima historieta publicada en la Inglaterra natal del autor en 2013, y que llega a España de la mano de la editorial Impedimenta.

Melancólica, Otoño dice sin decir, seduce con lo mínimo. Su cadencia, minuciosa, es en buena parte culpable, con viñetas que se suceden como el tic-tac de un reloj. Escaso diálogo, apenas cinco colores (negro, salmón, azul, blanco y morado) y un delicado tono íntimo, poético. La rutina está llena de no-rutina, parece decir McNaught, de 30 años, Premio Revelación en el Festival de Cómic de Angulema en 2013 y considerado un autor de culto. Un festival en el que se premió, en su día, a pesos pesados como Art Spiegelman, Moebius o Will Eisner. Solo se puede pedir que, lo antes posible, podamos ver traducida al castellano más parte de la valiosa obra de McNaught, repartida entre varias novelas gráficas y trabajos de ilustración para The Washington Post o New York Times, entre otros muchos.

José Angel Sanz