RICARDO Siri, Liniers en el mundo del dibujo gráfico, lleva años obsequiándonos con sus tiras macanudas, en las que nos invita a abrir la puerta a la fantasía y la imaginación. Pero al mar-gen de eso, también es poseedor de una gran calidad para crear re-latos muy variados. Señala el artista argentino que empezó a imaginar este cuento infantil después de realizar una fotografía de sus tres hijas miran-do la selva en Yucatán. Son precisamente ellas tres, Matilda, Clementina y Emma, las protagonistas de este emotivo cuento infantil en el que las pequeñas se embarcan en una aventura de exploración de una isla misteriosa. En la más pura tradición de los cuentos infantiles y con un tremendo espíritu aventurero, disfrutaremos de la desbordante imaginación de tres niñas que crean un universo plagado de se-res insospechados, como un mi-ni-gorila de bolsillo que vive en una pequeña casa en la base de un árbol, un dragón no demasiado fiero que echa fuego por la nariz o un grupo de extrañas flores parlanchinas. Flores salvajes es un breve re-lato de lo que apreciaríamos, y en lo que casi nunca reparamos, si en una tarde verano si pudiéramos ver a través del prisma infantil que hace años dejamos olvida-do a un grupo de críos dando rienda suelta a su imaginación, esa que los lleva a construir una historia fantástica sólo con los primeros cinco objetos que tiene al alcance de la mano