Ximo Abadía, artista gráfico español al que siguen la pista medios como Los Angeles Times, nos ofrece su particular visión del gran libro de bricolaje sexual en este Kamasutra para domingos lluviosos (Impedimenta).

El Kama Sutra es un libro escrito en el siglo XV en la India por el sabio –al menos en coyunda– Vatsiaiana. Es uno de los libros de la historia de la edición con más conjunciones copulativas. En sus páginas, donde habla de asuntos tan diversos como la elección de esposa o el arte de la seducción, muestra hasta 64 posturas para el acto sexual. Un excelente manual para parejas con falta de imaginación y capacidad para el contorsionismo. Lo que hace Ximo Abadía (Alicante, 1983 ) es llevarlo a su universo de personajes que se estiran como si fueran de chicle y recurre al imaginario circense y a un sentido del humor inteligente para armar un álbum elegante y divertido.

El autor sigue la línea del original al mostrarnos de cuántas maneras dos personas pueden conectarse, pero lo hace con un minimalismo cargado de sugerencias. Y llega a transmitirnos que en esas posturas no solo hay encaje, sino también conexión. El sexo no es solo un arreón de hormonas –que también–, sino una forma de comunicarnos. Una manera, como nos dice Ximo Abadía, de compartir los momentos de rugido y subidón, pero también los días de lluvia. Este es un libro para animar esas lánguidas tardes de domingo. Sugerencias no faltan. Arte, tampoco. Dice Ximo Abadía que le gustan «las cosas pequeñas, el desorden, perderse, andar descalzo». En este libro los personajes siempre van calzados, pero él es fiel a su estilo de una elegancia en rojo y negro que busca siempre el asombro cómplice. No epatar, sino compartir sus ensoñaciones con aire de travesuras. Lo consigue.

Por Antonio Iturbe