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Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

Me acuerdo

Me acuerdo es la espontaneidad de la memoria hecha libro: una sucesión no ordenada de anotaciones memorísticas que con el tiempo ha llegado a ser una obra de culto entre los amantes de lo experimental.

Argumento:

Inclasificable como todo Perec, el libro es un almacén de recuerdos del autor enunciados en frases sencillas, espontáneas, la mayor parte de ellas con poca o ninguna búsqueda de lo literario. Se trata de 480 recuerdos recogidos de una manera tremendamente subjetiva, aparentemente casual, que oscilan entre lo más vivencial, lo generacional, el enunciado de un recuerdo fugaz o una sentencia más o menos evocadora.

Me acuerdo es la espontaneidad de la memoria hecha libro: una sucesión no ordenada de anotaciones memorísticas que con el tiempo ha llegado a ser una obra de culto entre los amantes de lo experimental.

Opinión:

Ya se sabe: con Georges Perec y sus epígonos uno tiene que saber a lo que juega cuando adquiere el libro, y ser capaz de entrar sin ningún tipo de reservas en el juego que el autor propone. En realidad debemos hablar de un divertimento que ya propuso, pues 1978 es la primera fecha de edición del libro. Por su descarada originalidad, el autor francés acumula tantos admiradores como detractores. El francés constituyó uno de los grandes nombres del grupo lúdico/literario Oulipo, que es una referencia de la literatura de culto para sus seguidores y una solemne tomadura de pelo -al menos literariamente hablando- para otros muchos.

Para los menos avisados hay que dejar muy claro que cualquier cuestión cercana al estándar es impensable para este rey de los inclasificables, aunque eso no le reste interés a la propuesta que ocupa esta reseña. Me acuerdo es una acumulación de anotaciones memorialísticas tan caprichosa como poco exhaustiva. No sigue un orden preciso ni tiene un objetivo declarado. Podría ser una libreta robada a cualquier persona que utilice la escritura de modo terapéutico, como un simple testimonio de su paso por este mundo que comienza siempre con el enunciado que da título al libro. Con el tiempo, como todo Perec, este volumen se ha convertido en una obra de culto. Por el libro circulan impulsos de memoria que recogen la infancia y juventud del autor, pero también muchas otras que son simples marcas generacionales, algunas de ellas fácilmente reconocibles y otras vertidas sobre el papel con un carácter más subjetivo. Por las frases desfilan cines, marcas, nombres de bulevares, libros, películas, cualquier cosa que haya llegado a impresionar la memoria del autor.

La traducción de Mercedes Cebrián sin duda añade valor a la edición de Impedimenta, y esta reseña parece una buena oportunidad para agradecer a estas editoriales de nuevo brío el esfuerzo por volver a poner en circulación obras de tanto valor como riesgo comercial. ¿Se atreven a jugar al juego propuesto por Perec? La decisión es suya.

Rafael Ruiz Pleguezuelos