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Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

Los Carter: orígenes de la moderna música popular

La historia de los pioneros del folk y el country en una novela gráfica de Frank Young y David Lasky.

Un buen día, hacia 1926, Alvin Pleasant Carter, su esposa Sara y Maybelle Addington, prima de Sara, se metieron en un extraño cuarto. El fondo estaba cubierto por unos cortinones rojos de los que salía una gran bocina. Los Carter, “The Carter Family”, iban a grabar su primer disco. Les pagaron 25 dólares –“es más de lo que ganaría haciendo la colada de todo el condado”, se sorprendió Sara– y, aunque el disco no llegaría a salir al mercado, el grupo había puesto la primera piedra de una carrera pionera. Millones de copias vendidas a lo largo de varias décadas, cientos de canciones populares recuperadas y, eso sí, en general poco dinero. Por entonces, representantes y discográficas ya se llevaban la parte del león en ese tinglado.

Los Carter, humildes campesinos de Virginia, fueron, junto con Jimmie Rodgers, los padres de la moderna música popular estadounidense. Con un repertorio basado en cánticos de iglesia, antiguas canciones tradicionales y las pinceladas de blues que les aportó su amigo el guitarrista negro Leslie Riddle, sentaron las bases discográficas de una corriente musical que alimentó el folk y el country de las décadas posteriores. Sin la influencia de sus discos y sus actuaciones no se entiende a Woody Guthrie ni a Pete Seeger ni a quienes, como Bob Dylan, siguieron su luminosa estela.

La familia Carter. Recuerda esta canción es el título de la apasionante y sutil novela gráfica, premiada con un codiciado premio “Eisner”, en la que el escritor Frank M. Young y el dibujante David Lasky han recreado la trayectoria vital y artística del grupo. Sus 43 capítulos, cuyos títulos son los de otras tantas composiciones, recrean la fascinación del devoto A. P. Carter por los temas tradicionales, su progresivo alejamiento de una Sara harta de que su marido se pase el día recopilando canciones, o la capital aportación de Maybelle, cuya magnífica técnica de guitarra generó el conocido como “rasgueo Carter”. Por cierto que una de sus hijas, June, se casaría con Johnny Cash.

Young y Lasky, y esa es una de las grandes virtudes de Recuerda esta canción, no se han limitado a narrar una historia de pioneros con éxito. El corazón de la novela son las dudas, los desencuentros, la contraposición entre una popularidad creciente y la dura vida cotidiana de los Carter desde la Gran Depresión hasta la década de 1940. Una familia con talento que tuvo la suerte de que la inquietud recopiladora de A. P. Carter coincidiese en el tiempo con el inicio de las grabaciones discográficas. Quienes quieran ponerle banda sonora al volumen sólo tienen que buscar “The Carter Family” en Spotify y subirse a la fritura de sus mágicos discos
de pizarra.

EUGENIO FUENTES