¿Se acuerdan de películas como Avatar, Matrix o Blade runner? pues la primera obra que publica con Impedimenta Sergi Puertas, estabulario’, tiene mucho que ver con su contenido futurista.

Esta obra contiene seis relatos caracterizados por una visión de España apocalíptica y catastrofista. El primero de ellos está protagonizado por un camarero de un restaurante cuyo ADN se fusiona con un traje de buda, que lo hace parecer una oronda figura y al mismo tiempo es su uniforme. Sin embargo, un error del software que lo controla hace que no se pueda despojar de él, con las consecuencias físicas que conlleva este suceso.

Otra de las narraciones se sitúa en un punto geográfico indeterminado, pero tiene que ver mucho con el terrorismo islámico. Muestra a dos mujeres españolas que conversan por teléfono mientras preparan el ‘rancho’ para unos soldados de origen árabe, todos los días cuando estos llegan ellas salen de la cocina y se ponen el burka. Tampoco se sabe muy bien de qué manera llegaron hasta allí solamente que están recluidas contra su voluntad y que tienen un ‘anfitrión’ al que deben satisfacer especialmente. Sin embargo, en el transcurso de un programa de televisión, su presentador las interpela directamente y les avanza que la resistencia se está organizando para rescatarlas.

En Estabulario, otro de los escenarios se encuentra en Andalucía, pero ahora es un país independiente, convertido en un parque temático para turistas y con muchas reminiscencias de los regímenes totalitarios. Un exiliado de la otrora comunidad española es el actor principal de una serie denominada Torremolinos, a través de un proceso de drenaje conectado a una máquina el público puede ver desde sus casas episodios de ficción basados en sus antiguas vivencias andaluzas.

Mientras que el relato que da título a la obra de Sergi Puertas se abre con dos personas que están en una cama mientras ven en la televisión una serie de dos comerciales de una máquina de cocina que van vendiendo puerta por puerta su producto. El mando es un elemento muy importante, porque a través de él deciden cómo va siguiendo la historia, una historia que se complica hasta límites insospechados e insólitos durante sus visitas para hacer demostraciones culinarias.

Este ejercicio narrativo es una de las sorpresas literarias del año, pues aunque bebe de escritores como Poe, Ballard, Chirbes, Lem, Cronenberg, Perrault o Borges, Sergi Puertas apuesta por construir un universo propio, único y cuanto menos inquietante.

Sus personajes son seres alienados por la tecnología; internet, las máquinas y la televisión los han despojado de su cacareada humanidad. Viven una realidad paralela, sus experiencias vitales están mediatizada por los artefactos que los rodean. Y en parte debido a estas circunstancias los hacen personas desgraciadas, rodeadas de sufrimiento.

Como consecuencia, el lector se sumerge en una atmósfera asfixiante, plagada de sucesos inesperados y muy surrealistas que lo trasladan a través de un túnel del tiempo a un futuro inmediato espeluznante, que tiene mucho en común con una popular serie de televisión: Black Mirror.

El autor catalán muestra a través de Estabulario una crítica feroz a lo que se han convertido nuestras vidas desde la llegada de las conexiones y las nuevas tecnologías a nuestra existencia, aunque en muchos casos son nuestras aliadas y nos facilitan, en esta obra aparecen como auténticas enemigas. Una apuesta literaria arriesgada que, sin duda, se erige como vencedora.

ÁNGELA BELMAR TALÓN