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Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

«Más trabajo para el enterrador»

La pluma de Alligham es soberbia, así como la capacidad de crear un crimen que nos mantenga en vilo, a pesar de la multitud de personajes que se suceden a lo largo de la novela, todos ellos con buenas razones para callarse determinados asuntos.

Un nuevo detective irrumpe en mi biblioteca personal y la pone patas arriba. Margery Allingham es una autora británica que llevaba tiempo queriendo leer, tras quedarme con la ganas de adquirir otro de sus títulos que, tarde o temprano, también caerá.

Esta autora, contemporánea de la archiconocida Agatha Christie y cuyas novelas también fueron degustadas con gran placer por la misma, creó al detective Albert Campion, quien protagonizó unas diecisiete novelas y más de veinte relatos, así como películas y demás adaptaciones.

La editorial Impedimenta está rescatando la obra de esta gran autora, desconocida en España. Más trabajo para el enterrador es la segunda novela del detective Allingham que la editorial recupera con gran acierto para nosotros los lectores de habla hispana.

Ruth, miembro de la familia caída en desgracia de la alta sociedad, los Palinode, es envenenada y el detective Campion será a quien se solicite ayuda con el caso. Le acompañarán el ex-delincuente y colaborador suyo Lugg, y el inspector de policía a cargo del crimen Charlie Luke. No se trata de un asesinato usual, igual que no es usual el exclusivo barrio de la fallecida, donde sus vecinos deben ocultar la decadencia de sus fortunas, donde hay enterradores con mucho amor por el oficio, médiums, falsificaciones de documentos e infinidad de asuntos curiosos y extraños que añaden más misterio, si cabe, a un crimen de no fácil resolución. El carismático e inteligente detective Allingham, será el único capaz de desenmarañar el ovillo de mentiras y secretos que envuelven el caso.

La pluma de Alligham es soberbia, así como la capacidad de crear un crimen que nos mantenga en vilo, a pesar de la multitud de personajes que se suceden a lo largo de la novela, todos ellos con buenas razones para callarse determinados asuntos. Lejos de restar, éstos suman mucho en el libro, ya que cada cual, a su manera, cumple una función clave para la trama. Divertida, ingeniosa e irónica, su autora nos retrata a una clase alta que raya el ridículo con sus estrafalarios actos, dirigidos todos a guardar la apariencias para que nadie sepa lo pobres que se han vuelto, así como la descripción de otros personajes muy siniestros.

Campion es un hombre muy inteligente (como todo buen detective, supongo) que se guardará información para sí, de modo que hasta el final de la novela no se nos desvelará el gran misterio. Un final, por cierto, muy satisfactorio para el lector.

Asimismo quiero destacar, la exquisita encuadernación y maquetación llevada a cabo por la editorial Impedimenta. Los libros están encuadernados en tapa blanda, con sobrecubierta, e incluyen una lámina que es un reproducción en miniatura de la propia portada. ¡Una preciosidad! Pero la cosa mejora, porque al quitarle la sobrecubierta, desvelamos que la cubierta del libro es una ampliación de la imagen de la portada, desprovista de cualquier título o nombre del autor que la estropee. Además, como es el caso de esta novela en concreto, se incluye un pequeño plano o croquis del lugar donde tuvo lugar el asesinato.

Más trabajo para el enterrador de Margery Allingham es una novela policíaca muy recomendable, sumamente entretenida y muy original que logra mantener el suspense hasta al final. Además, cabe destacar la gran calidad de su prosa, que incrementa con creces la experiencia lectora y consigue meternos de lleno en su misteriosa trama. ¡Mil gracias a la editorial Impedimenta por el ejemplar!

No os quedéis tampoco sin leer El signo del miedo, de la misma autora, y también publicado por Impedimenta.