A Reina Lucía hay que reconocerle una cosa: resume, con gran fuerza, ese modelo literario que ha hecho sonreír a varias generaciones a costa de la burguesía británica. La excentricidad inimitable de sus protagonistas y las fantásticas estratagemas que conciben para escapar del tedio son, también para los lectores, un bálsamo contra el aburrimiento.
Hacendosa y avispada, Emmeline Lucas –Lucía, en confianza– defiende su reinado en la tumultuosa escena social de Riseholme, «puesto que había sido ella la primera en hacer que aquella remota villa isabelina se convirtiera en la corte cultural que ahora era».
Riselhome es un pueblo, pero Lucía se comporta como si todos los lugareños, sin excepción, fueran guapos y solventes.
Por supuesto, en esta balsa de aceite puede iniciarse una marejada, y la culpable es Olga Bracely, una prima donna con las ideas demasiado claras.
Al principio, Lucía desea que la Bracely vaya a Riseholme para cantar ópera, pero no tardará en arrepentirse.
En medio de este enfrentamiento de egos, el cotilla y complaciente Georgie Pillson, firme aliado de Lucía, hace lo que puede por no convertirse en una baja en esa guerra que se avecina.
Repleta de personajes pintorescos y adorables, Reina Lucía es la primera entrega de una serie de novelas protagonizadas por Emmeline «Lucia» Lucas y Elizabeth Mapp, que inmortalizaron a E. F. Benson en la memoria popular.
Un destino literario
Benson nació en 1867 y él mismo parece un personaje novelesco. Atleta, aficionado al patinaje y prolífico escritor, se inspiró para crear varias de sus obras en la localidad de Rye, en East Sussex, donde ejerció funciones de alcalde.
La saga de Mapp y Lucia incluye seis novelas y dos relatos. Hagamos recuento. Las novelas son Queen Lucia (Reina Lucía), Lucia in London, Miss Mapp, Mapp and Lucia, Lucia’s Progress y Trouble for Lucia. Los cuentos llevan por título «The Male Impersonator» y «Desirable Residences».
Aunque su difusión entre los lectores angloparlantes ha sido amplia, estas creaciones fueron popularizadas por una teleserie producida por la London Weekend Television: Mapp and Lucia (1985–1986), impecablemente interpretada por Prunella Scales, Geraldine McEwan y el gran Nigel Hawthorne.
La muerte del escritor no impidió que la saga novelesca continuase. De hecho, nuevas novelas de Mapp y Lucía fueron comercializadas con las firmas de Tom Holt y Guy Fraser-Sampson.
Dato curioso: Benson también es autor de algunos inolvidables relatos de horror que fascinaron al propio H. P. Lovecraft.
Por Guzmán Urrero