cabecera 1080x140

Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

Como verán, esto de hablar de obras literarias adaptadas al cómic es ya prácticamente una subsección dentro de esta sección del periódico que es mi columna semanal, pero es que no hay mes en el que no se edite como mínimo un título de estas características a tener muy en cuenta. Hoy les comentaré las excelencias de cuatro, empezando por la joya de la corona: Vida y opiniones de Tristram Shandy, caballero podría haber sido una versión más o menos fiel -si es que tal cosa es posible refiriéndonos a una obra de dimensiones tan considerables- de la novela homónima del británico Laurence Sterne, pero lo que propone su compatriota Martin Rowson es una adaptación libre que resulte tan (post)moderna en nuestros días como moderna fue en su día la obra original; téngase en cuenta que el libro de Sterne es uno de los principales culpables de que hoy podamos hablar del género novelesco como tal.

Así pues, estamos ante una novela gráfica apabullante, de un estilo visual que bebe de diversas influencias: del Cerebus de Dave Sim, con la que guarda bastantes concomitancias, a obras de Sam Kieth como Epicuro el Sabio o The Maxx, sin olvidar las animaciones del cineasta Terry Gilliam para el Flying Circus de los Monty Python; todo ello para acabar pariendo una propuesta de obra total en la medida en que lo son From Hell de Alan Moore y Eddie Campbell o Alice en Sunderland de Bryan Talbot respecto del episodio histórico de Jack el Destripador y la inmortal heroína infantil de Lewis Carroll. Sí, son referentes que asustan de puro genio, pero lean a Rowson y verán cómo no voy demasiado desencaminado.

Por Francisco J. Ortiz.