Una historia que se inicia en Luton en 1982 y finaliza 50 km más lejos y 30 años más tarde en Londres que recoge la historia de una banda de rock desde su formación e incluso antes, desde que se conocieron dos de sus miembros y fueron formándose como músicos, pero también como personas que se abren al mundo desde la postadolescencia universitaria a la madurez.
Con una prosa que engancha según describe las vivencias que paso a paso y sin prisa van sucediendo a sus protagonistas. Deteniéndose el autor sin desviarse más que lo justo en acontecimientos que se producen de forma paralela a la trama principal y que reflejan el contexto social en el que la banda crece.
La clase media orgullosa de sus orígenes en plena crisis política y económica (thatcherista) y social (ruptura generacional padres-hijos) en un escenario postpunk… y no solo musical que de géneros, estilo, grupos y canciones va bien servida la obra… y es que las referencias musicales son de aúpa, con algunos momentos que son pura crítica periodística… hasta que el éxito te atrapa y te convierte.
El auge y la caída de Ships In the Night, banda protagonista que transita por todos los tópicos y devenires del rock, contado con brillantez y un finísimo humor que otorga a la obra un punto de visa que contradictoriamente a lo dicho le aleja del tópico. Brillante y divertida obra en sus diálogos inteligentes y situaciones divertidísimas… sin alejarse de un velado, pero profundo plano reflexivo e incluso crítico como metáfora de una sociedad que sueña ilusionada para darse de bruces con la realidad tras unos minutos de gloria…
…en relación con otra magnífica obra que pareció en esta sección hace unos meses, “La madriguera dorada” de Catalin Partenier, en el que en parecida trama con la música y los grupos de por medio, reflejaba el fin de la sociedad comunista en el contexto de la Rumanía de Ceaucescu. No parece quedar nada donde agarrarse….
—Antonio Cancho, Rock and Roll Army, 17 de abril de 2023