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Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

«El libro y la hermandad», de Iris Murdoch

«Un grupo de amigos unidos por lazos invisibles de amor, lealtad, y una promesa de un libro por parte del miembro más polémico del grupo. Un libro coral, con unos personajes y secundarios muy bien trazados. Una magnífica novela».

Termino el libro con ganas de más. Y eso que no es un libro corto precisamente. Seiscientas cincuenta páginas. Que no os asuste la longitud, eso lo hace aún más apetecible. Un grupo de amigos unidos por lazos invisibles de amor, lealtad, y una promesa de un libro por parte del miembro más polémico del grupo. Un libro coral, con unos personajes y secundarios muy bien trazados. Una magnífica novela.

Como en la comedia de Shakespeare, con la excusa de una fiesta de antiguos alumnos de Oxford, un grupo de amigos se reúne bajo el cielo estrellado de una noche de verano. Allí se encuentran el carismático Gerard Hernshaw y Rose Curtland, enamorada de él en silencio desde hace años; Duncan Cambus y su infatigable esposa Jean; Tamar Hernshaw, la atormentada sobrina de Gerard; y, por último, David Crimond, el extravagante genio marxista. Hace años, todos ellos decidieron crear una hermandad con el único propósito de financiar un libro de filosofía en el que Crimond, su carismático líder, se encargaría de plasmar sus ideas políticas. Pero con el paso del tiempo las lealtades han cambiado y durante esa velada los vengativos fantasmas del pasado se presentan para sacudir el presente y destruir la plácida existencia de unos amigos que quizá ya no lo sean tanto.

Para que os hagáis una idea de este libro, a mí me ha recordado mucho a la película “Los amigos de Peter”. Me he pasado toda la lectura poniéndole la cara de Stephen Fry a uno de los personajes. También son un grupo snob, intelectual, que han crecido juntos y ahora se encuentran en un momento de sus vidas en que echar la vista atrás y darse cuenta de lo ganado y lo perdido.

Una caracterización detallada de los personajes, incluyendo toda una retahíla de secundarios que le dan frescura a la historia. Me ha parecido una novela atemporal, que podría estar escrita en cualquier momento de la historia incluyendo el actual.

La sexualidad en la novela es muy sutil pero se mantiene constante como una de las piezas que maneja al grupo. Sexualidad dual, personajes que se ven atraídos nada más conocerse, que sufren una química irresistible, subyugantes (parece que basados en la relación de la autora con el Nobel Elías Canetti) o que anhelan durante años a la persona amada. Amores que se cruzan unos con otros, que duran para siempre o duran un minuto. Esta novela es una novela de amor, pero dicho así os puede confundir. Es una novela sobre anhelos, sobre el deseo del individuo frente a la colectividad.

Te mantiene todo el tiempo pegado a la novela, pensando, ¿y ahora qué? ¿Cómo saldremos de esto? ¿Qué dirá él, qué dirá ella? ¿Y finalmente, cómo será el libro? Responde a estas cuestiones, excepcionalmente a la última. Éste es el tramo de la novela que más me ha encandilado, la explicación de Gerard sobre “El libro”. No me lo esperaba.

No conocía esta autora hasta hace no mucho y me sorprendo al indagar sobre ella y verla como uno de los autores en lengua inglesa (ella era irlandesa) más influyentes del siglo XX. Incluso hay una película de Kate Winslet y Judi Dench sobre su vida libre de prejuicios sexuales y marcada en sus últimos años por el Alzheimer. De la mano de Impedimenta yo he conocido tres de sus obras y estoy esperando poder leer muchas más. En una de sus declaraciones indica que sus novelas salían del deseo de contar “un buen cuento divertido”. Me encanta esta definición de su obra.

Con unos giros inesperados en la trama y una llamada a la reflexión moral, este libro es una maravilla absoluta. El postfacio de Rodrigo Fresán también me ha gustado muchísimo. Desgrana de una forma muy divertida la obra, comparto todo lo escrito por él. Por todo esto recomiendo su lectura para los que gusten de la buena literatura anglosajona. Habrán descubierto a una autora magnífica.

Ni un día sin libro