Misterios, vínculos nuevos y viejos, recetas, fi losofía, memorias y relatos escalofriantes. De autoras rescatadas, consagradas y noveles. Porque abril, el mes del libro, invita a dejarlo todo para sumergirse en estas páginas.
(1) Gabrielle Wittkop dominó los misterios perturbadores como se ve en Serenísimo asesinato (Cabaret Voltaire).
(2) Sonia es una mujer sola en el masculinizado mundo del rodeo. Kathryn Scanlan hace oír su voz en A toda brida (errata naturae).
(3) Caja 19 (Malas tierras), que habla de vida y literatura, es la primera novela de la británica Claire-Louise Bennett.
(4) Dos parejas de hermanas protagonizan La herida imaginaria (Áncora y Delfín), de la compostelana Berta Dávila.
(5) Catherine Meurisse ilustra con humor la historia de la filosofía en Humana, demasiado humana (Impedimenta).
(6) La poeta y veterinaria cordobesa María Sánchez vuelve con Fuego la sed (La Bella Varsovia).
(7) La islandesa Audur Ava Ólafsdóttir habla sobre comadronas y naturaleza en La verdad sobre la luz (Alfaguara).
(8) Secretos, huidas y reencuentros llenan La distancia que nos separa (Libros del Asteroide), de Maggie O’Farrell.
(9) Isobel English formó parte del círculo de Olivia Manning y Muriel Spark. En Todos los ojos (Muñeca infinita) sus personajes viajan a una Ibiza aún salvaje.
(10) Natalia Ginzburg escribió en 1957 Valentino (Acantilado), que explora temas como la clase y el matrimonio.
—Ana Fernández Abad