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Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

«El percherón mortal» entre los libros que harán tu verano ‘noir’ — El Cultural, El Español — 29 de julio de 2024

Culpables que quizá sean inocentes, delirantes y absurdas persecuciones, asaltos a familias que guardan oscuros secretos… Un año más, no hay verano sin sus crímenes. Mientras Joël Dicker regresaba algo temprano, en abril, adelantándose a todos con Un animal salvaje (Alfaguara), Donna Leon acude puntual a su cita estival con el mercado editorial español. En El fuego purificador (Seix Barral) la gran dama del noir nos transporta a una incendiaria Venecia en un nuevo caso de su emblemático comisario Brunetti.

Tampoco el irlandés John Connolly se ha quedado a la zaga: si el verano es una caja de Pandora que los escritores abren para esparcir sus crímenes, del sombrero de la chistera del creador de Charlie Parker han salido Las furias (Tusquets). El irlandés resucita a estas criaturas mitológicas capaces de atormentar a quienes han cometido los crímenes tal vez impartan de una vez justicia. O no.

De lo que no cabe duda es de que queda inaugurada la temporada de la novela negra. Pero, ¿y si este año el enemigo durmiera en casa? El suspense psicológico y los crímenes relacionados con la familia se multiplican en un verano en que los grados del termómetro han dejado de dar tregua y en el que los asesinos están más cerca de nosotros que nunca y los escritores juegan, e incluso se ríen de nuestras mentes.

(…)

Ahora bien, si lo que busca el lector es algo totalmente distinto, El percherón mortal (Impedimenta) es la respuesta a sus plegarias. Esta refrescante novela lo tiene todo: giros inesperados, intrigas, actrices asesinadas, psiquiatras con amnesia, personajes enigmáticos… Una divertida puesta en escena con tintes más lynchianos que si la escribiera el propio David Lynch.

Y eso a pesar de que la vida de su autor, John Franklin Bardin (1916-1981), no fue fácil. Con una infancia marcada por la muerte de varios familiares cercanos a causa de distintas enfermedades, él mismo tuvo que ingresar a su madre en un centro psiquiátrico después de que tuviera graves brotes esquizofrénicos. A sabiendas, no deja de resultar curioso que en El percherón mortal el escritor juegue con los límites entre locura y realidad.

Y si no, juzguen ustedes mismos. La historia comienza cuando Jacob Blunt acude a la consulta del psiquiatra George Matthews porque unos misteriosos hombrecillos han empezado a aparecérsele y pedirle que haga cosas completamente absurdas a cambio de dinero. Para asegurarse de que son reales y no producto de su imaginación, el buen doctor accede a acompañarle sin saber que eso le arrastrará por un mundo extraño y surrealista hasta que una actriz es asesinada y aparece un caballo percherón atado frente al apartamento de la víctima.

La destreza de Bardin a la hora de manejar el absurdo en los diálogos y las situaciones, además de construir el suspense, convierte esta lectura en la mejor aliada para combatir el calor. ¿Nos estaremos volviendo todos locos como Jacob Blunt?

—Marta Ailouti