cabecera 1080x140

Premio Nacional a la Mejor Labor Editorial Cultural 2008 (Grupo Contexto)

Catherine Meurisse (1980, Niort, Francia) es licenciada en Lenguas Modernas e Historia del arte. Como ilustradora colabora en diferentes revistas y periódicos e ilustra cuentos infantiles. Su carrera como autora de cómics cuenta con obras como Moderne Olimpia, Le Pont des arts o, la única traducida al castellano hasta ahora, la fenomenal La comedia literaria (Impedimenta, 2016). Desde 2005 forma parte de la plantilla de autores de la veterana revista satírica Charlie Hebdo, fundada en 1969, donde da muestra de su humor ácido, con un gran trasfondo literario y artístico, haciendo cercana y cotidiana la “alta cultura”. Además, fue la primera mujer que entró en el equipo de dibujantes, cuando, a su propio parecer, aún no estaba a la altura. En la revista creció y maduró como autora, además de encontrar una familia. De nuevo con Impedimenta, nos llega esta novela gráfica que viene avalada por el gran éxito de ventas, críticas y premios que ha cosechado en Francia.

El 7 de enero de 2015, Catherine Meurisse llegó tarde a la reunión de equipo de Charlie Hebdo. Gracias a ese retraso, sobrevivió a la matanza en la que asesinaron a 12 personas e hirieron a 11, aunque no salió indemne. Horrorizada. Rota. Sola. Sin referentes. Perdió la memoria y su mano era incapaz de dibujar.

¿Cómo se sobrevive a algo así? ¿Cómo se recompone uno de un trauma que te arrebata a la vez a tus compañeros de trabajo, a tus amigos y a tus referentes? Con una relación de pareja complicada y no la más adecuada para este proceso, teniendo que sacar fuerzas de flaqueza para seguir colaborando con el semanario y absolutamente bloqueada y aislada mentalmente, ¿cómo retomas una vida que ha quedado en suspenso y abotargada? En definitiva, ¿cómo recuperas esa ligereza, esa levedad que te hace disfrutar y dar sentido a tu profesión de humorista?

La solución, la cura, aunque no fácil, la encontrará en la belleza. Buscando redescubrirla y recomponerse, iniciará un periplo que le llevará a perseguirla primero en la naturaleza, en el mar. Después en la literatura y su “ayudante de vida” Marcel Proust. Más tarde volverá a las calles de París, antaño tan inspiradoras. Acabará su periplo en la Villa Medici, en Roma, donde irá a la búsqueda de su propio síndrome de Stendhal.

RECORRIDO

En todos estos lugares y momentos iremos viendo su fragmentada realidad, su disociación, su bloqueo, su dolor. Las referencias artísticas y literarias recorren todo el relato, de manera natural y simbólica. Munch, Rothko, Everett Millais, Baudelaire o Proust, entre otros, se van imbricando en la narración, mostrando sus propios emociones. En palabras de la autora: “no es un libro sobre la inteligencia o el raciocinio, sino sobre los sentimientos y las sensaciones”.

Aunque queden cicatrices, ha vuelto a encontrar la alegría de dibujar para seguir creando. Todo este proceso lo ha plasmado en un tebeo con un dibujo en el que conviven armónicamente lo caricaturesco y lo naturalista, el blanco y negro y el color o el drama y el humor. Cuando lo acabas, te das cuenta que se te ha hecho instantáneamente inolvidable.

IÑAKI GUTIÉRREZ