Presentación WMagazín En días de carnaval como estos nació Maryse Condé hace 82 años, el 11 de febrero de 1937, en Pointe-à-Pitre, capital del archipiélago de Guadalupe. Su nombre dio la vuelta al mundo cuando en octubre pasado la llamada Nueva Academia de Suecia, en sustitución de la Academia Sueca que en 2018 no entregó el Nobel de Literatura debido a las investigaciones de acoso sexual en el seno de la misma, la distinguió con el Nobel Alternativo de Literatura.
La escritora francófona y gran voz de las letras antillanas tendrá este 21 de febrero un encuentro con sus lectores en Barcelona con motivo de la publicación en España de Corazón que ríe, corazón que llora (Impedimenta), del cual WMagazín avanza en primicia el pasaje donde relata las circunstancias de su nacimiento. Será en una entrevista con el periodista y escritor Xavi Ayén, en la librería La Central, de calle Mallorca, a las 19 horas.
Antes del Nobel Alternativo, Condé ya había obtenido otros rconocimientos como el nacional de Literatura sobre la Mujer por su novela Moi, Tituba sorcière (1986), el Premio Anaïs-Ségalas de la Academia Francesa por La vie scélérate (1988) y en 1993 fue la primera mujer que recibió el Premio Putterbaugh, otorgado en Estados Unidos a escritores francófonos.
La escritora estudió en París y ha residido en diferentes países de África, especialmente en Mali, donde se desarrolla su saga Ségou (1985). Es autora de más de una treintena de obras que van desde la novela al relato, pasando por piezas de teatro, ensayo, novelas infantiles y su autobiografía. En sus libros se interrogan sobre la memoria y la identidad, tanto individuales como colectivas. Una memoria y una identidad habitadas por mujeres luchadoras y por los fantasmas de la esclavitud, la diáspora negra y el colonialismo como se aprecia en títulos como La migration des coeurs (1995), Desirada (1997), Célanire cou-coupé (2000) o Victoire, les saveurs et les mots (2006), homenaje a su abuela materna.
Maryse Condé ha enseñado durante décadas literatura francófona en la Universidad de Columbia, en Nueva York. Presidió el Comité por la Memoria de la Esclavitud en Francia (2001), cuyo trabajo se materializó en la ley que reconoce la esclavitud como un crimen contra la humanidad. Es la creadora del Premio de las Américas Insulares y Guyana, que recompensa anualmente al mejor libro del panorama antillano.
La lectura que ofrecemos en WMagazín de Corazón que ríe, corazón que llora trata de su nacimiento durante el Mardi Gras, el gran carnaval guadalupeño.